19 diciembre 2015



"LA NOVIA"
de Paula Ortiz
basada en "Bodas de sangre" de Federico García Lorca

UN UNIVERSO ENTERO DE EMOCIONES GIGANTESCAS
UN IMPACTO EMOCIONAL DESDE EL PRIMER MINUTO



Meses de espera deseando ver la adaptación cinematográfica de "Bodas de sangre" de Federico García Lorca, bajo la dirección de Paula Ortiz. 
Lorca es uno de mis escritores favoritos, de entre toda su obra, mi preferida es "Bodas de sangre" y Paula Ortiz me cautivó con "De tu ventana a la mía", su primera y única película hasta ahora, con la que descubrí un cine trabajado y bello. Con todos estos precedentes podían suceder dos cosas, o  me gustaría a rabiar o me defraudaría totalmente. Y no sólo me ha gustado, me ha parecido ABRUMADORA.

Por su exquisita adaptación. La forma en que Paula Ortiz nos acerca al universo lorquiano me maravilla. Algo así como un hilo invisible une cada simbolismo con su correcta representación. El caballo, la luna, los puñales... Cuando la novia escupe cristales, su labio se hiere igual que el de la anciana que la visita para decirle "no te cases si no le amas". Cuando la novia, el novio y Leonardo, entre juegos y risas de niños caen al suelo de igual manera que caerán años después, cuando vuelva la hora de la sangre.

Por sus maravillosas interpretaciones. Inma Cuesta y Luisa Gavasa están inmensas. Asier Etxeandía y Alex García las acompañan en el camino de forma soberbia. Todos y cada uno de los actores interpretan las palabras de Lorca con una naturalidad aplastante. La fuerza del texto llega al alma, a las entrañas, hasta dejar sin respiración.

Por su música. La música magistral del compositor japonés Shigeru Umebayashi impregna de más emoción, si cabe, cada momento, así como  las canciones tradicionales con las que se combinan, como "La tarara" o "Dice la nostra novia". Esta última como fondo en una estupenda secuencia en la que algunos de los invitados bailan alrededor de una hoguera y nos lleva a uno de los momentos culminantes de la película, Leonardo frente a la novia y entre ellos el fuego.

Por la fotografía de Migue Amedo, puro arte.

Por sus paisajes áridos que transportan a un lugar imaginario, desconocido, perdido y que contagian la atmósfera sofocante y el aislamiento.

Por sus sonidos. La novia intentando levantarse del barro, el lamento de la madre del novio son los primeros sonidos que se escuchan,  e inquietan como preparación ante lo que va a acontecer.

Lorca dijo "la noche no es un momento, pero un momento puede durar toda la noche". Es lo que ocurre con "La novia", es un momento. La vida está llena de momentos y algunos perduran y nos acompañan siempre "y te siguen por el aire como una brizna de hierba". 
"La novia" ha conseguido que los versos de Lorca salgan de boca de mucha gente que nunca leyó "Bodas de sangre". Magnífico el cine hecho poesía.